lunes, 29 de marzo de 2010

4.200km


La nave surca los campos,
se deja caer.

Las válvulas en par
tiran de la cuerda
desatan la suerte.

Los perros comen
de tu mano
y vos de la suya.

El sueño se forma
nebuloso
los planes, las etapas
no lo atrapan.

Nada cambia en una semana,
ni en dos.

Luego se lava la mugre,
se borran las huellas
y
vuelve el rumbo
a lo conocido.

Demasiado rápido
todo
es un recuerdo lejano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario